sábado, 14 de marzo de 2015

EL HOMBRE DE LA PIEL DE OSO

El hombre de la piel de Oso







ADAPTACIÓN DE UN CUENTO FOLCLÓRICO PARA INFANTIL


El cuento que voy a adaptar está basado en la historia “la piel de oso” de los hermanos Grimm.

Mi adaptación la he realizado pensando en niños de edades comprendidas entre los  5 - 6 años debido a la longitud de la propia historia, ya que a mi parecer es una edad muy buena y adecuada, donde los niños son capaces de seguir una lectura contínua e ir fijándose en los detalles del texto. Los niños a estas edades tienen mucha imaginación y pueden recrear las historias en su mente.

El lenguaje que emplea esta historia es adecuado para estas edades, debido a que no es muy complejo de entender y mayoritariamente utiliza frases simples para la mejora de su comprensión.

En cuanto a su vocabulario es sencillo, aunque emplea alguna que otra palabra desconocida, pero siempre será positivo añadir palabras nuevas ya que los niños a estas edades muestran interés en conocer y aprender vocabulario y cada día un poco más.

Es un cuento muy atractivo, ya que trata de una aventura que mezcla la realidad con acciones mágicas, que esto será más impactante para ellos y captará mejor su atención. Además, a estas edades empiezan a comprender algunos valores como el castigo y la recompensa.

He cambiado algunos aspectos de la historia, son los siguientes:

·         En primer lugar, he puesto nombres propios a todos los personajes de la historia, ya que para los niños es mas fácil de identificarlos.

·         He modificado el planteamiento de la historia, debido a que no me parecía adecuado algunos aspectos de ella para niños de infantil, como por ejemplo, que el protagonista de la historia hubiera estado presente en una guerra, o que sus padres habían fallecido, y que sus hermanos le impedían la entrada en su casa.

·         Del nudo he cambiado también algunas cosas que no me parecía adecuada con la lectura para infantil, por ejemplo la parte en la que el hombre matase al oso para demostrar su valentía, es decir, he intentado suavizar algunas escenas innecesarias para la continuidad de la historia. Pero he defendido y mantenido el hilo conductor de la historia, para que permanezca la intriga y el interés hasta el final de ella.

·         Del desenlace lo único que he modificado es la parte del suicidio de las hermanas, ya que a mi parecer estaba fuera de lugar, cambiándolo por el enlace de éstas con el “Gnomo”. Es decir, he intentado basarme en una historia en la que nadie muere, es muy similar a la original pero he pretendido evitar estos acontecimientos para que no sea una historia cruel a ojos de los niños.

·         Por ultimo, en cuanto a los personajes, sólo he modificado el personaje del Diablo y las intenciones que tiene, ya que no me parecían muy correctas y lo he sustituido por un “Gnomo” cuyas intenciones eran convertir al muchacho en su sumiso para el resto de su vida.

Desde mi punto de vista el demonio es un personaje posiblemente demasiado oscuro para una lectura del aula de infantil, por este motivo he cambiado el personaje. Respecto al resto de personajes los mantengo más o menos iguales o similares, he hecho algunos cambios durante el transcurso de la propia historia.

La información de algunos aspectos que he modificado puedes encontrarlos en los siguientes enlaces:




Con todo esto, procedo a contaros mi adaptación al cuento original “El hombre de la piel de oso”.

Había una vez, hace muchísimos años, en un pueblo muy lejano, un joven llamado Alejandro. Era un chico guapo y fuerte que decidió marcharse de casa para participar en todo tipo de aventuras, de conocer el mundo, y conseguir algo de dinero por sí mismo, y si tuviera suerte, encontrar la mujer de mi vida.

Pasaron muchos años y el joven se cansó de buscar aventuras, de conocer el mundo e intentar casarse con alguna mujer ya que no había conseguido casi nada de dinero en todo este tiempo que había estado fuera de casa. El joven cansado y agotado, decidió volver a su casa, con la intención de buscar trabajo en su poblado y así poder vivir tranquilamente en su casa con su familia.

Su familia esta formada por su mamá que se llamaba Alicia, su papá que se llamaba Alaín y sus dos hermanos Alba y Aldo.

Al llegar a su casa, llamó a la puerta, esperando que su familia le acogiera con gran entusiasmo, volvió a llamar, esperó unos segundos y abrió la puerta, pero, quien abrió la puerta no era ni sus padres ni ninguno de sus hermanos, sino un anciano, al que nunca había visto. y le preguntó:

Perdone señor, esta es mi casa, la casa de mi familia ¿Sabe usted dónde están?, ¿Los ha visto?

El anciano le contestó:

Sí, conocí a tus padres hace unos años, nos vendió la casa a mi mujer, a mis hijos y a mí, porque no tenían dinero para tanto gasto y mantenerla, me hablaron de ti, Alejandro, estaban muy preocupados ya que como no sabían escribir no podían enviarte ninguna carta explicándote lo que sucedía. Me dijeron que si su hijo volvía a casa le hiciera saber que toda la familia se habían ido sin un destino claro, debido a que no tenían recursos, estarían de un lado para otro, asique no les busques porque estarán viajando por el mundo con la intención de encontrar un hogar en el que poder vivir. Mi consejo es que encuentres un trabajo, una casa, ya que ésta ya no es tuya, sino de mi familia.

El pobre chico asumió la noticia y empezó a buscarse la vida. Recorrió distintos pueblos buscando trabajo, pero nadie quería dar trabajo a un chico con ese aspecto y sin experiencia en nada ya que nunca había trabajado de nada, ni ayudado a sus padres, solo había pensado en él y en vivir aventuras.

Pasaron los meses y el joven no encontraba trabajo, pedía dinero y comida por las calles. De repente, de lejos vio venir a un caballero vestido de verde. Cuando éste paró ante Alejandro, se dio cuenta de que se trataba de un caballero elegante, de clase y con riquezas, pero en la cara tenía algo raro, unos rasgos muy raros, se parecía un poco como al de un animal. Alejandro confuso se quedó perplejo, y el caballero se acercó y le dijo:

- ¿Te puedo ayudar?

- Pues depende, depende de lo que me vaya a costar esa ayuda, dijo el joven extrañado y asustado.

- El caballero contesto: Nada. Te puedo ofrecer hacerte el hombre más rico del mundo, a coste de nada.

- El muchacho alucinado, le dijo que le dijera las condiciones, que era muy raro todo, que no se fiaba, porque no le conocía de nada.

-El caballero contestó: antes de saber si eres merecedor de este dinero, necesito saber si eres valiente o un cobarde.

Entonces Alejandro se sintió furioso, y le dijo: cómo podía ser cobarde un aventurero que se había marchado de casa a muy temprana edad, sólo con la intención de buscar aventuras sin la ayuda de nadie, es de ser valiente. En ese momento se levantó y dijo:

- ¿Dónde se ha visto eso?,¿Aventurero y Cobarde?

- El caballero, con una sonrisa muy burlesca, le dijo:

- ¡Veamos si es verdad!, ¡date la vuelta!

Cuando el muchacho se dio la vuelta se encontró un oso enorme que había salido de la nada, era enorme y se estaba abalanzando sobre él. Alejandro se puso en posición amenazante de frente al oso, hizo un rugido impresionante y agitando los brazos consiguió espantar al oso.

- El caballero le dijo:

- Muy bien, creo que me has demostrado que no eres un cobarde y  veo que sabes defenderte y reaccionar. Ahora te voy a poner unas condiciones y si las aceptas firmamos nuestro trato y no sé si te habrás dado cuenta de qué soy.

En ese momento el caballero chasqueó los dedos y se convirtió en un Gnomo vestido con los mismos trajes que llevaba el caballero, por lo que ahora al convertirse en Gnomo le quedaba todo enorme. El joven fascinado por la transformación le preguntó que si le podía pasar algún peligro aceptando ese trato.

-Depende de lo útil que seas, si eres capaz de vencerme, tú quedarás libre, sino, tendrás que ser mi siervo para el resto de tu vida. - le contestó el Gnomo.

El joven le dijo: bueno pues dime cuales son las condiciones.

A lo que contestó el Gnomo - Pues verás yo te voy a dejar este traje que yo llevo puesto, es un traje mágico,  cada vez que metas las manos en los bolsillos podrás sacar puñados de monedas de oro, y podrás sacar todas las veces que quieras.

Entonces el joven preguntó- mmm, pero entonces ¿Qué tendría que hacer a cambio?

- No tendrás que hacer nada a cambio, simplemente tendrás que vivir durante 7 años en las condiciones que yo te imponga, 7 años que tendrás que ir vestido con este traje llevarás la capa que yo te diga que tienes que llevar, no podrás asearte, ni cortarte el pelo, ni las uñas, ni cambiarte de ropa.. -Añadió el Gnomo.

El joven lo pensó tranquilamente y aceptó su acuerdo. Entonces el Gnomo se quitó el traje, se la dio, y el joven se vistió, era un traje verde tan llamativo, tan brillante y tan rico. Lo primero que hizo fue meter la mano en el bolsillo y cuando la sacó estaba llena de monedas de oro.

- Bueno pues aquí tienes tu capa - le dijo el Gnomo dándole la prenda.

Entonces el joven se dio la vuelta y se dio cuenta de que mientras él se estaba poniendo el traje, el Gnomo llevaba en las manos una piel de oso parecida a la del oso con el que se había enfrentado y el Gnomo añadió:

- Esta es la capa que tienes que llevar, debes llevar una piel de oso puesta y no puedes ni lavarte, ni cortarte el pelo, ni las uñas durante 7 años.

El joven aceptó el trato. Si durante esos 7 años el muchacho moría el Gnomo le reviviría para que fuera su sirviente para toda la vida, si al final de esos 7 años se mantenía con vida el Gnomo le daría todas las riquezas que hubiera ganado y acumulado durante esos 7 años y desaparecería de su vida para siempre.

Una vez que el Gnomo se había marchado, Alejandro empezó a caminar y a buscar cosas en la vida. Lo primero que hizo fue buscarse una casa para poder guardar dinero para cuando dejara de tener ese traje.

Los primeros meses se dedicó, como buen joven que era y aventurero, a disfrutar de la vida, a tener comida, a tener una cama, a vivir una vida de ricos.

Pero claro, según iba pasando el tiempo le iba creciendo el pelo, la barba, las uñas, tampoco se podía lavar por lo que empezó a oler un poco mal y la gente se apartaba de él. A pesar de eso cuando le empezaron a negar la entrada en los sitios caros, porque asustaba a los demás clientes,  cambió de táctica y se dedicó a ayudar a la gente que lo necesitaba y cuando veía a alguien que necesitaba dinero, como él tenía dinero de sobra les daba dinero y le pedía que fuera a algún sitio para comprar comida para los do, así se evitaba él entrar en las tiendas y asustar a todo el mundo, y luego les pedía siempre que rezaran a dios por su alma, por su perdón y porque se mantuviera vivo durante esos 7 años. De esta manera fueron pasando las semanas, los meses y los años.

Cuando ya  habían pasado 4 o  5 años, el hombre de la piel de oso era una verdadera bestia, lleno de pelo, sucio, maloliente, además como no le dejaban dormir en ningún sitio porque nadie le quería acoger en su casa, tenía que dormir en el suelo, la capa y el vestido estaban sucios, húmedos, era asqueroso. Ya apenas nadie se acercaba a él y él seguía intentando ayudar a la gente, pero muchas veces era desde lejos, porque la gente no quería acercarse a él, como si tuviera la peste.

Un día, buscando donde pasar la noche, preguntó a un hostelero: ¿Podría pasar aquí esta noche? 

El anciano le respondió un poco dudoso, pero al final le dejo pasar la noche dentro del pajar. 

Escuchó un susurro, bajito, se levantó y se asomó por la ventana, y vió a un hombre mayor que estaba muy triste y llorando. Le preguntó, ¿Señor, que le pasa?¿Le puedo ayudar en algo?, el anciano alzó la mirada y le dijo: por circunstancias de la vida he perdido mucho dinero, he tenido que pedir un préstamo, y ahora me reclaman el préstamo. Tengo tres hijas que todavía tengo que casar y lo más posible es que pierda mi casa y mis hijas se quedaran solas, el anciano estaba destrozado y no sabía qué hacer. Entonces el hombre de la piel de oso le dijo:

-no te preocupes, yo te ayudaré, ¿Cuánto dinero necesitas para pagar tu casa? ¿y para volver a empezar tu negocio?

-el anciano contesto cabizbajo: mucho.

- Pues yo te lo daré -le dijo el hombre de la piel de oso echándose las manos al bolsillo.

A pesar de que Alejandro daba miedo y olía mal, lo abrazó y le dio las gracias por todo, y como agradecimiento le ofreció casarse con una de mis hijas.

Alejandro aceptó, así que se fue con el anciano a su casa. En la casa le esperaban las tres hijas del anciano, las dos hijas mayores eran bellísimas, y en cuanto vieron a Alejando, se comportaron reáceas, se asustaron y salieron corriendo, pero la hija más pequeña, se llamaba Azucena, era la más guapa de todas, lo miraba a los ojos y veía que detrás de todo ese pelo y detrás de toda esa suciedad había unos ojos inteligentes y bondadosos y los días que estuvo el joven en la casa del anciano la hija aprovechó para hablar con él. Se fueron conociendo y a la chica le pareció que era un buen hombre. Él siempre la decía que en unos años las cosas cambiarían. La chica le preguntaba, pero éste no podía contárselo ya que era una promesa.

Azucena aceptó casarse con Alejandro. Alejando se puso muy contento porque los dos estaban enamorados, entonces Alejando como símbolo de amor se quitó un anillo de oro que llevaba guardado en el bolsillo, que era un recuerdo familiar, partió el anillo por la mitad y le dio la mitad del anillo a Azucena.

Te prometió volver en 3 años, si en 3 años no vuelvo, tendrás que sentirte libre porque nuestro amor se habrá roto y no se podrá cumplir. Sin embargo si yo vuelvo dentro de 3 años y tú todavía tienes este anillo y me recuerdas, nos casaremos y seremos felices para siempre.

La chica se despidió de él con mucha pena, y las hermanas se despidieron de él con mucha alegría. El muchacho siguió su camino, siguió ayudando a todo aquel que lo necesitara.

Efectivamente, pasaron los 7 años y Alejandro volvió a reencontrarse con el demonio. El Gnomo llegó convertido en caballero y según venía de lejos el joven se dio cuenta de que estaba muy enfadado, porque el joven había conseguido superar la prueba.

- Con mal genio le dijo: devuélveme mi ropa…

-El joven contestó- Vale, pero devuélveme mi aspecto.

El Gnomo dijo unas palabras mágicas y desapareció. El joven volvió a tener su aspecto que tenía antes.

Se fue a su casa para comprobar que el dinero que había guardado estaba en su sitio, compró un caballo y se fue a buscar a su Azucena.

Llamó a la puerta y pidió posada para quedarse a dormir, el anciano enseguida le reconoció y le dio una habitación para dormir. Cuando llegó la hora de la cena, se juntaron todos en la mesa, 
Alejandro se dio cuenta de que Azucena iba vestida de negro, estaba triste, cabizbaja, y a pesar de que un chico había aparecido, ni siquiera le había mirado a la cara.

Alejandro se acercó a Azucena y le entregó la mitad del anillo de oro que tenía guardado en el bolsillo. Ella se quedó sin palabras, fue corriendo a su habitación y volvió con la otra mitad del anillo.

Las hermanas que eran muy envidiosas, salieron de la casa enfadadas, y decidieron entregarse al primero hombre que pasara, con tan mala suerte que pasó el Gnomo disfrazado de caballero. Las dos hermanas al ver al Gnomo se acercaron rápidamente a él y le suplicaron que se casara con algunas de las dos.

-El Gnomo respondió: Os propongo un trato, como con las dos no me puedo casar, os prometo cuidaros a cambio de que seáis mis siervas para el resto de vuestras vidas. Las hermanas con mucha envidia, se miraron y aceptaron el trato.

Alejandro, que ya no llevaba la piel de oso, se casó y fueron muy felices.

Al cabo de unos meses, el Gnomo llamó a la puerta del anciano, se puso delante de Alejando y le dijo:

Cualquier pacto conmigo siempre será una ventaja para mí, es cierto que te he perdido como mi siervo, pero gracias a ti he ganado a dos.


Y colorín colorado este cuento se ha acabado. 

9 comentarios:

  1. Hola Soraya,
    Me ha resultado una historia muy bonita, has conservado aquellos aspectos más fundamentales de la historia, dándole un toque personal y menos agresivo a la historia. Me ha encantado sobre todo el aspecto que le has dado a la historia al convertir al demonio en un gnomo que se disfraza de caballero. Es un aspecto que a los más pequeños seguro que les gusta mucho y con el que posteriormente se puede trabajar en clase con ellos para que creen e imaginen.
    Hay varios aspectos que en mi opinión cambiara.
    Uno de ellos es el aspecto referente al paso del tiempo, 7 años en mí opinión es un periodo bastante amplio para que los más pequeños entiendan ya que no manejan todavía correctamente a los 5 años. A lo mejor deberías reducir un poco el tiempo.
    Otro aspecto que cambiaria seria “Efectivamente, pasaron los 7 años y Alejandro volvió a reencontrarse con el demonio.” Si conviertes al demonio en gnomo a lo mejor deberías cambiar lo de demonio por gnomo o caballero para que los niños no confundan los personajes, ya que en toda la historia no mencionas que el gnomo es un demonio.
    Por lo demás esta genial y me ha encantado la historia. Muy buen trabajo Soraya!!!

    Un saludo!!!

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    1. Muy buen comentario, Sandra, aunque no coincido contigo en el tema de los años. A los 5 años, los niños son perfectamente capaces de entender este concepto. Manejan los años que tienen sus hermanos mayores con soltura... y basta con entender que 7 son muchísimos para no lavarse ni arreglarse.

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    2. Muchas gracias sandra por tu comentario. Modificare algunas cosillas con el fin de mejorar, y dejarlo perfecto. Espero que una vez modificado te pueda servir de ayuda y utilidad este cuento.

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  2. Hola Soraya,

    Has hecho una bonita adaptación del cuento y adecuada a la edad a la que va dirigida..
    (Una pequeña indicación: “El hombre de la piel de oso” es un cuento recogido por los hermanos Grimm, no conocemos el original.)

    En tu cuento respetas la estructura interna, planteamiento, nudo y desenlace. Además lo escribes con mucha fantasía y manteniendo los magia a lo largo del relato.

    Lo que no comparto del todo contigo es que modificas aspectos de la historia para suavizarla a los niños, para que no sea tan cruel, pero las cambias por circunstancias realmente tremendas.
    Los niños de 5 y 6 años son perfectamente capaces de procesar que el protagonista va a la guerra, sus padres fallecen, sus hermanos son egoístas, se mata a un oso…
    En cambio dejas a la familia de Alejandro vagando por el mundo, y él “asumió la noticia”. No sé si es fácil de entender.

    En el desenlace del cuento, las hermanas se van de casa y “decidieron entregarse al primer hombre que pasara”. Esa escena es fuertísima, así como tu final del cuento en el que el gnomo vuelve a casa a vanagloriarse de que “ha ganado dos siervas”.

    Los niños a los que van dirigido tu cuento necesitan finales felices y tu final es un poco sombrío.

    Ah! Y atenta a lo que te ha comentado Sandra de que Alejandro “se reencuentra con el demonio”.

    En mi opinión, puedes mejorar tu relato y te va a quedar una estupenda adaptación.

    Un saludo,
    Carmen


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    1. Total y absolutamente de acuerdo contigo, Carmen. Espero que Soraya tenga en cuenta tu comentario además del mío.

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    2. Carmen, primero darte las gracias por tu comentario ya que es verdad que he de modificar algunas cosas del cuento, porque es cierto que pueden llegar a ser crueles.
      modificare algunas cosas para que quede perfecto.
      Espero que te sea de utilidad.

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  3. Bueno, Soraya, te digo lo mismo que a Sandra: tú eres quien ha realizado la adaptación y la longitud, es un aspecto fácilmente adaptable. La frase "Mi adaptación la he realizado pensando en niños de edades comprendidas entre los 5 - 6 años debido a la longitud de la propia historia" no es muy adecuada. No es el cuento (la longitud) quien marca la edad, sino el adaptador. En la literatura de autor, la edad adecuada la marca el libro; en la literatura folclórica eres tú, como maestra, quien acerca el texto a los niños de una u otra edad... pero no por la longitud, sino por el enfoque y por los aspectos que remarques y en los que te detengas.
    Este texto NO ES PARA SER LEÍDO, sino para ser CONTADO, por lo que tu argumento " los niños son capaces de seguir una lectura continua e ir fijándose en los detalles del texto" no es adecuado en este contexto. En ese sentido, el lenguaje no es tan importante ya que, cuando cuentes cualquier cuento, vas a cambiar tanto la longitud de las frases como el vocabulario que has utilizado al escribir tu adaptación.
    Sí es interesante la referencia a la imaginación, pero has de argumentarlo con fuentes fiables. Deberías completar un poco las caracteristicas psicoevolutivas de los niños en relación a la temática, la fantasía, la relación entre causas y consecuencias, la simbología, etc...

    La explicación de los cambios es adecuada aunque no debes sobreproteger a los niños de algunos aspectos que son de lo más común en los cuentos folclóricos (como la muerte de los padres). En las adaptaciones cinematográficas de Disney aparecen todas esas cuestiones de las que hablas y no pasa nada.

    Se nota que has buscado la versión de los hermanos Grimm y te has basado demasiado en ella, por lo que tu adaptación es un poco larga, pero bueno... cuando la cuentes tú misma te darás cuenta de que es la respuesta de los niños la que marcará el ritmo de la narración.

    Si cambias lo que te comento arriba, tu entrada será perfecta.

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    1. Modificare todo aquello para que la adaptación quede perfecta. Muchas gracias irune

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  4. Cual es el inicio nudo desenlace del cuento la piel de oso

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